Se viven malos tiempos para la espontaneidad y, lo que es peor, para la sinceridad. Se supone que nos enseñaron a pensar antes de abrir la boca. Parecía lógico, no fuera que dijeras una bobada.
En estos tiempos resulta que, antes de abrir la boca, hay que pensar a quién puedes ofender. Y, sea o no pertinente lo que pienses, sea o no necesario exponerlo y debatirlo, si hay alguien a quien puedas ofender, mejor cállate. Cállate siempre o, lo que ocurre frecuentemente, di lo contrario de lo que piensas, sonríe y cágate por lo bajinis.
Y la cosa es todavía peor: si has ofendido a alguien, la culpa es tuya y sólo tuya. La intolerancia, incapacidad mental o mala fe del ofendido, no importan, la culpa es tuya y debes retractarte (o exiliarte, o suicidarte...).
Resumiendo, afirmo que lo que llaman "LO POLÍTICAMNETE CORRECTO" es pura "CENSURA" rebozada en modernidad y falso progresismo.
En este blog pretendo denunciar todos aquellos casos en los que se utilice el argumento de la ofensa y la caza de brujas para coartar la libertad de expresión del sufrido ser humano. Donde sea, por quién sea y con la excusa que sea.
Animo a todo aquel que conozca casos al respecto me los haga llegar para publicarlos en este blog.
Y para empezar con buen pie, compañeros, caguémonos un ratito en Dios y en sus acólitos, aquí en la tierra.
Inauguramos este Blog ofreciendo 100 sacos de caspa y dos de peladillas de cesta de Navidad a quien nos traiga el cadaver del fantoche de Santa Claus y su espíritu consumista (ah!, perdón, navideño). No importa que sea el auténtico, aceptamos el cadáver de cualquiera que se ponga semejante vestimenta.